¿Qué es la EM/SFC?

La Encefalitis Mialgica/Síndrome de Fatiga Crónica EM/SFC, es una manifestación patológica de origen desconocido, reconocida por la OMS bajo el CIE 10. Cursa con un estado de fatiga persistente por un periodo superior a seis meses, pudiéndose en muchas ocasiones definir su inicio. No se relaciona con esfuerzos intensos ni con otras patologías que puedan cursar con Fatiga, las cuales se descartan en el diagnóstico.

La enfermedad ocasiona una reducción importante de la actividad diaria de la persona, un malestar post esfuerzo y una incapacidad de recuperación en plazos superiores a los considerados como normales.

La reducción de la inactividad, que puede ser física y/o mental,  va desde un 50% a la inactividad total, quedando el afectado postrado en cama, dependiendo de segundas personas para su cuidado habitual.

Este cuadro viene acompañado de otras manifestaciones multisistémicas como son:

  • Mal estar o fatiga post esfuerzo
  • Trastornos del sueño
  • Dolor
  • Manifestaciones neurológicas/cognitivas
  • Alteraciones motoras de la percepción
  • Síndrome de piernas inquietas
  • Intolerancias ortostáticas
  • Trastornos respiratorios
  • Irregularidades intestinales
  • Disfunción de la vejiga y urogenital
  • Espasmos dolorosos en las extremidades
  • Manifestaciones Neuroendocrinas
  • Manifestaciones inmunes
  • …etc.

También los niños manifiestan esta patología, con especificidades concretas

Existen cuatro grados de valoración de la enfermedad, la cual puede superponerse con otras del grupo de SSC.

Es altamente desconocida y determinable por falta de biomarcadores reconocidos, impera es su diagnóstico la exploración física y las manifestaciones que pueda expresar el paciente. La mayoría pueden identificar su inicio, posteriormente, a un cuadro infeccioso importante. Analiticamente suelen tener unas serologías positivas a determinados agentes infecciosos, como el «Epstein Barr», «enterovirus», «herpesvirus humano del tipo 6», Candida albicans y Mycoplasma incognita.

Actualmente existe una alta controversia, puesto que se han realizado estudios,pese a las limitaciones que existen para ello, en el que se identifican marcadas disfunciones en el sistema inmunológico con aceptables resultados al aplicarseles tratamientos antivirales y/o inmunodepresores. Es tan solo una línea de investigación no concluyente pero si indica un camino que requiere explorar, mas cuando existen escasas intervenciones en su estudio.

Existe una escasa investigación, alta controversia entre los profesionales y los que la  aceptan y la tratan tampoco unifican criterios, llevando líneas diagnósticas y valorativas distintas (Fukuda 1994), (Criterios Canadienses), (Nuevo consenso 2011), sin que se haya acordado realmente consenso alguno.

Los pacientes se encuentran únicamente con tratamientos sintomáticos, tan solo paliativo, con aporte de sales  minerales de Magnesio, vitaminas, analgésicos, antiinflamatorios, antidepresivos, determinados anticonvulsionantes como Lyrica …etc., aunque al no ser resolutivos y muchos de ellos profesionalmente discutidos.

La mayoría de los afectados los abandonan, acudiendo a la medicina complementariaen busca de soluciones que tampoco suelen ser efectivas.

Es una enfermedad de alta conflictividad personal, familiar y
social.

Toda esta compleja situación, hace que los afectados se sientan, como en la mayoría de las enfermedades del grupo SSC, desvalido y desprotegido de la atención sanitaria adecuada y de la protección social requerida por la dependencia que conlleva en los grados tres y cuatro.

Deja un comentario